“DISTANT DANCEFLOORS”, es el último documental creado por Pioneer DJ, que trata la evolución de la música electrónica desde los últimos meses de 2019 hasta el momento actual.

En 2019, la industria de la música electrónica estaba en su mejor momento. Su valor en ese momento se estima en unos 7,3 millones de dólares y la mayor parte, un 60% corresponde a los eventos. Sin embargo, con la llegada en 2020 del COVID-19, que ha provocado el cierre de discotecas y festivales en todo el mundo, ese valor podría caer un 56% a finales de año. Lo peor de todo, es que hay millones de personas que dependen de este sector (Camareros, Managers, Iluminadores, Técnicos de Sonido, Conductores, personal de restauración, seguridad…). Muchas personas que trabajan en la sombra para que el espectáculo pueda realizarse.

¿Cómo podemos hacer una fiesta si nos exigen estar a dos metros de distancia de los demás? ¿Cuál es la diferencia entre disfrutar un set en una discoteca o en tu habitación? ¿Cuál es la importancia de la música en nuestras vidas? ¿Cómo serán los eventos después de la pandemia?. El último documental de Pioneer DJ se sumerge en la situación actual de pandemia global y en cómo esto ha afectado a la cultura electrónica. Pero no solo con cifras de pérdidas o con informes de cancelaciones. La película “DISTANT DANCEFLOORS” va más allá y profundiza en el shock colectivo vivido dentro de la industria mundial por el parón provocado por el COVID-19.

Con testimonios de algunos artistas influyentes de la escena como Luciano, Honey Dijon, East Everything, Blond:Ish y Rebuke, el documental hace un repaso de cómo era la industria a finales del pasado año y como afectó el parón en las vidas profesionales y personales de los DJ’s. Además, hablan del dilema moral y personal que supuso el momento en el que tuvieron que decidir si seguían haciendo shows o si detenían su actividad por completo. Y es que, para un DJ internacional con bolos en diferentes países la misma semana, la responsabilidad es muy alta por la visibilidad que tiene, pero también por los puestos de trabajo que dependen de sus shows.

El documental de 30 minutos explora la situación que se vivió en el mundo del ocio nocturno cuando el virus empezó a llenar las portadas de los periódicos con muertes en diferentes países: “Era algo surrealista estar tocando en una sala llena de miles de personas cuando empezabas a oír sobre temas de confinamiento al principio de la pandemia.” dijo Honey Dijon.

Pero no solo habla de la situación de parón de la escena electrónica. También intenta profundizar en cómo los artistas, los sellos y otros actores han cambiado su visión sobre el mundo y han procurado mantener su actividad en la distancia. Cómo los clubes pueden existir en una época de distanciamiento social y como la propia industria intenta reformularse para sobrevivir en una época totalmente distinta al año pasado. Tratan la fiebre de los lives en redes sociales y cómo esto puede ser una alternativa de fuente de ingresos y promoción para muchos artistas.

El documental de Pioneer DJ ofrece una visión en 360º sobre el impacto económico, psicológico y social que el COVID-19 ha causado en la cultura clubbing global. Ofrece reflexiones y testimonios de otras figuras importantes como Kevin Watson, autor del International Music Summit Business Report y Paul Reed de la Asociación de Festivales así como directivos de talento y fans.

Todos los DJ’s que intervienen en el documental coinciden en algo: El confinamiento les ha ayudado a parar después de años de gira continua y de centenares de bolos anuales. Coinciden en que no sabían cómo parar y que el descanso durante un tiempo era necesario. Hablan sobre como han aprovechado este tiempo para inspirarse y volver a reconectar con sus pasiones. “El aburrimiento es necesario para llegar a la inspiración”.

A pesar de que todos los DJ’s que participan en “DISTANT DANCEFLOORS” reconocen que será difícil volver a medias, con restricciones de aforo y distancia de seguridad en las fiestas “Es algo contrario a las raves”. Afirman que la música electrónica volverá y que un año de parón no va a destruir una industria tan grande.