El club techno más famoso de Berlín, el Berghain, se convierte en una instalación de arte y por primera vez podemos ver su interior.

El club Berghain es conocido por muchos como uno de los mayores templos del Techno. Cada noche de apertura en este club se crean enormes colas en las que los asistentes esperan para entrar. Es muy frecuente encontrar gente que espera en la cola convencido de que le dejarán pasar y luego no es admitido. Los porteros imponen una estricta política de entrada y prácticamente nunca dejan pasar a todo el mundo. De echo, mucha gente se queda fuera. Incluso han negado la entrada a famosos. No existe un criterio para entrar o no entrar. La clave está en pasar desapercibido y que le caigas en gracia al portero.

El lugar es más que peculiar. Por fuera parece un museo de arte. Cualquiera diría que la instalación en la que se encuentra pertenece a una antigua central eléctrica. ¿A qué no lo pensabas? Esto lo hace ser más espectacular.

De experiencia sonora a exposición de arte

En unos tiempos donde los clubes, las discotecas y las salas de baile no tienen cabida por las masificaciones que esto supone, algunos han decidido dar un paso adelante y buscar alternativas a sus negocios. El club berlines Berghain es uno de ellos. La discoteca ha decidido explotar una de las facetas que mucho tienen que ver con al historia del club y la música. El arte contemporáneo.

Los artistas Sam Auinger y Hannes Strobl han utilizado en las últimas semanas el interior de este emblemático edificio para crear un ambiente poco frecuente en la discoteca. Han creado una experiencia sonora, única por la estructura del edificio. Recordad que es una antigua planta eléctrica. También han limitado mucho el aforo de la instalación. Habitualmente el club acogía hasta 1500 personas, ellos acogieron 50 personas, por grupos, para que pudieran moverse y disfrutar del espacio y la experiencia.

A pesar de que esta experiencia no es a la que los asistentes habituales están acostumbrados, muchos de ellos acudieron igualmente. El club Berghain no ha perdido popularidad pero es precisamente por su exclusividad por lo que muchos asistentes acuden. Muchos no han podido ver el espacio nunca y por una vez pueden tener la posibilidad de ver el recinto, aunque sea de una forma diferente.

El objetivo principal del proyecto de exposición es reflejar las tendencias y cambios actuales en el arte y la sociedad y dar a los artistas de Berlín un lugar para presentar su trabajo artístico.

Ahora el club se convertirá en una exposición de arte llamada Studio Berlin. Esta exposición se abrirá al público a partir del 9 de septiembre y albergará tanto pinturas como esculturas y también contará con exposiciones audiovisuales con el sonido y el vídeo como protagonistas. Experiencias únicas que Christian y Karen Boros ya han creado en otros recintos peculiares como un búnker.

¿Qué pasará con la cultura de club en Berlín?

El club Berghain abrirá sus puertas de nuevo en septiembre, pero de una forma muy diferente. ¿Persistirá esta reinvención durante mucho tiempo? Pues no lo sabemos. Cómo muchos otros países, Alemania se encuentra en un momento peliagudo para los clubs y las discotecas.

Muchas capitales europeas son una atracción mundial precisamente por su cultura musical, por sus fiestas y por sus clubs y discotecas.Ocurre esto por ejemplo con Berlín, Ibiza o Amsterdam, que se están viendo muy afectadas por estos parones. Y no solo los clubs se ven afectados, los pequeños locales cercanos a ellos están viendo como sus negocios se hunden.

El Senado de Berlín ha abierto este mes una segunda convocatoria para que los clubs y discotecas puedan acogerse a ayudas directas. La ayuda podrá paliar el daño que el coronavirus está haciendo a estas empresas pero no el daño que está haciendo a los shows, festivales, conciertos y pequeños empresarios. Esperamos que pronto se puedan poner pequeñas soluciones que puedan reducir el impacto de pandemia, no solo en Alemania sino en todo el mundo.